"Novísima osadía:
Comentarios sobre el libro

Temas y variaciones"


Por: Rafael Medina Dávalos
Diario El Informador, Guadalajara
Domingo 15 de agosto, 2004

Que un joven escriba un libro de cuentos a los 23 años no tiene nada de extraordinario. Que sus narraciones sean de corte fantástico, mucho menos. Que los temas y los tonos sean marcados por la influencia de sus lecturas inmediatas es lo esperado en un novel literato. Pero si dijéramos que un escritor, con las características previas, tuvo la audacia de no conformarse de permanecer dentro de los límites de lo sensato y se atrevió a escribir variaciones sobre grandes relatos de escritores universales, podría sonar preocupante, descabellado. Y si agregamos, además, que los escritores son Italo Calvino y Jorge Luis Borges, tendríamos que añadir el adjetivo suicida. Sin embargo, aunque parezca sorprendente, Tryno Maldonado, el escritor aludido, sale airoso del reto autoimpuesto con su Temas y variaciones, anómalo y excelente libro escrito y editado en la ciudad natal de su autor: Zacatecas.


Temas y variaciones está compuesto por diez relatos que no ocultan las pasiones de su creador: la literatura y la música. Sobre la primera, escribe una serie de variaciones narrativas del mundo creativo de Calvino y Borges. Estrictamente metaliterario, aborda a los escritores desde múltiples e inhóspitos ángulos con la más cínica y directa de las artimañas que puede tener un artista: el atrevimiento. Aquí reescribe El castillo de los destinos cruzados de Calvino, allá toma la voz del mismo Borges y plantea teorías insospechadas del origen de algunos de sus cuentos. Recrea una atmosfera llena de ajedrez, laberintos y perplejidad ante el indescifrable rostro del tiempo. No vacila, bordea diestro la boca del precipicio, no improvisa, conoce la literatura de los maestros. Se regodea entre renglones ajenos, reordenándolos, acomodándolos como sólo él es capaz de hacerlo, con el placer de hacerlo en territorio conocido.

Respecto a la música, el zacatecano se le percibe más que conocedor. De una manera que raya en la erudición, despliega lo mejor de su novísima narrativa en el cuento "Tema del secreto de Stradivarius". Conocimiento histórico, musical y literario se conjugan para conformar un texto memorable, que por sí mismo sustenta la lectura del libro todo. Valida, a su vez, los datos biográficos proporcionados del autor, señalados en la obra, donde se hace referencia a estudios formales de música.

Es de llamar la atención, en la contraportada del libro, los comentarios vertidos sobre la obra inaugural del prometedor escritor. Y no precisamente por su contenido, sino por las firmas que figuran: Ignacio Padilla, Pedro Ángel Palou y Jorge Volpi. Las cabezas más visibles del controvertido grupo del Crack. Situación que no es de extrañar si ya se leyó la obra comentada, donde es más que evidente el paralelismo estético entre el trabajo de Maldonado y el del grupo literario referido. Aunque habrá que apuntar que el aproximación se da en las aristas más favorables de los escritores ya apuntalados en el escenario de la letras nacionales. O en el marketing mundial, opinarían otros, maliciosos. El coqueteo del joven podría parecer peligroso a muchos. O demasiado favorable, opinarían esos mismos otros a que ya hice referencia. Lo verdaderamente importante es que su literatura se sustenta por sí misma.

Así que habrá que aplaudir la aparición en el escenario de un escritor con tal capacidad de osadía y cinismo como las mostradas por Tryno Maldonado con sus Temas y variaciones. Que denota su modernidad en el trazo de caminos ajenos, ya andados, reconfigurándolos a placer, por ser brillantes, por serle no propios, pero conocidos, admirados. Es un especie de malabarista que promete hacer actos maravillosos a una altura increíble, sin red, y nos asusta con semejante atrevimiento. Pero que después nos permite gozar, gozarlo, todo osadía, todo seguridad, haciendo cosas increíbles, malabares maravillosos, cumpliendo contra todo pronóstico. Bienvenido Tryno Maldonado.

-Rafael Medina Dávalos